Preámbulo
El Instituto Municipal de Vivienda de Málaga, organismo dependiente del Ayuntamiento de Málaga, es el encargado de gestionar y administrar el conjunto del patrimonio inmobiliario de viviendas de titularidad municipal. Su principal cometido es el impulso y promoción de viviendas protegidas y sociales para satisfacer la demanda de los ciudadanos.
La intención del IMV de Málaga, y concretamente la de su Servicio de Gestión del Patrimonio de Alquiler, siempre es la de que sus inquilinos tengan una convivencia tranquila, digna, y que las condiciones económicas estén acordes al mantenimiento y perpetuación de las viviendas que son de propiedad y gestión municipal. De ahí que la gestión de la morosidad sea un aspecto fundamental, ni mucho menos por un afán recaudatorio, sino porque el patrimonio público siga teniendo lo máximo posible la funcionalidad que le fue encomendada en su origen, que no es otra que ofrecer un parque de viviendas de calidad a los ciudadanos, ofrecerles un mantenimiento acorde a sus características y llevar una gestión administrativa de las mismas marcada por la transparencia.
Ante la situación económica tan complicada que nos rodea, con los consecuentes dramas sociales y familiares que producen estas sentencias, y teniendo la potestad para poder iniciar trámites en ese sentido, el Instituto Municipal de la Vivienda de Málaga quiere que esta sea la última opción, y que además no tenga que aplicarse por motivos de escasez económica.
Como conocedores de la realidad, y más concretamente de la realidad socioeconómica y laboral de sus inquilinos y usuarios, para que la ocupación siga siendo la adecuada, la convivencia tranquila y pacífica y las viviendas cumplan su función social; la innovación en materia de lucha contra la morosidad es fundamental, para no ahondar en la exclusión social de las familias con bajos ingresos, y dándoles un instrumento con el que poder planificarse sus obligaciones de pago en función de sus rentas.
Destacar el carácter de consenso y acuerdo temporal entre administración y usuarios, fortaleciendo el papel de las administraciones locales; así como la necesidad de sensibilizar en materia de finalización de deuda y cumplimiento de compromisos. Estos Planes Especiales de Pago, por otro lado, no pretenden mirar hacia otro lado en materia de cuantías económicas que deben entrar en las arcas municipales; sino establecer unos protocolos que aseguren que, durante un tiempo, se van a seguir abonando las rentas de alquiler y comunidad, así como se van a garantizar la liquidación de las partidas que, durante ese periodo, se dejen de abonar.
El usuario puede seguir disfrutando de su vivienda con la tranquilidad de que, durante un tiempo, las rentas van a ser satisfechas en una proporción a sus ingresos que les liberen para el resto de obligaciones económicas que conlleva un hogar. Mientras que la administración sigue cumpliendo con su función de recaudación, garantizando el cobro de este tipo de partidas, y sensibilizando a los inquilinos de la necesidad de aportar al común, aún en tan complicadas coyunturas.
Introducción
Siempre con la intención de que el desahucio o desalojo sea la solución más extrema, sólo justificado cuando la morosidad va en aumento y los servicios de inspección del Instituto Municipal de la Vivienda de Málaga comprueban en sus informes y visitas que los ingresos del inquilino son acordes a sus rentas y costes de mantenimiento, se idea para reducir los impagos el denominado proyecto ‘Planes Especiales de Pago’.
A través de un informe de los Servicios Sociales Comunitarios, el Servicio de Gestión del Patrimonio en Alquiler puede estudiar si un caso de morosidad se puede adscribir a este proyecto. A partir de ahí, la administración diseña con ánimo de consenso con el usuario un plan de pago con un plazo determinado, unas condiciones mínimas y un compromiso por ambas partes, de cara a que el acceso a la vivienda siga siempre abierto.
De esta forma, los servicios de gestión llegan al último rincón de las condiciones socioeconómicas de los inquilinos, de presente y de perspectiva de futuro, para que el objetivo del pago de las cuotas de alquiler y de comunidad sean satisfechas al menos de forma gradual.
Además de un seguimiento por parte de los Servicios Sociales Comunitarios de todos los compromisos adquiridos, hay entrevistas y visitas periódicas para analizar las situaciones anexas siempre a la económica, como son la laboral, la familiar, la emocional, la de convivencia, la de salud… También hay un trabajo entre administraciones para la comprobación y cruces de datos necesarios para la baremación y entrada en el plan.
1. Datos
1.1.- Título:
Planes especiales de pago.
1.2.- Descripción de la actuación:
De cara a frenar la morosidad y facilitar el pago a los inquilinos usuarios de las viviendas de propiedad municipal que gestiona el Servicio de Patrimonio del Alquiler del Instituto Municipal de la Vivienda de Málaga, se diseña un plan de pagos con el usuario, en función de sus ingresos y condiciones socioeconómicas y familiares. Hay compromisos por ambas partes para que la deuda se extinga y la relación propietario-arrendatario siga por los cauces normales, ahuyentando cualquier opción de expediente de desahucio.
Modalidad Mejor estrategia para facilitar el acceso a la vivienda
- Instituto Municipal de la Vivienda